martes, 3 de abril de 2012

VOLAR MÁS ALTO

EL ELEFANTE ENCADENADO

MEMORIA Y EMOCIÓN


No puedo, no puedo y nunca podré.
Estas palabras, a menudo, son escuchadas y dichas por diferentes personas a lo largo de la vida.
Las emociones que tienen un componente negativo hacen que pesen demasiado sobre nosotros. Recordar una situación en la que el fracaso fue el protagonista de la escena hace que revivamos esa misma acción y que recordemos como nos sentíamos, impotentes, incapaces.
Con frecuencia, esas emociones y recuerdos negativos que un día no nos dejaron continuar inundan nuestro ser,  cayendo desplomados sin ver más allá, olvidando logros y potencialidades que nos obstaculiza avanzar.
Para poder andar en el camino de la vida y llegar hasta el éxito es necesario antes fracasar para aprender de nuestros errores, pues el caerse no nos hace retroceder sino buscar otras herramientas y otras alternativas que nos posibiliten llegar a nuestra meta.
El ser humano teme a lo desconocido, ante el cambio, pues lanzarse a vivir es arriesgado, nos asusta, pero por mucho que nos asuste el ser humano tiene que aspirar a más, no se debe conformar con lo que tiene porque piensa que no puede lograr un cambio, o porque simplemente una vez no fue capaz,  sino que a pesar de no tener una red de seguridad que nos recoja cada vez que caigamos es necesario “volar” cada vez más alto sin miedo a intentarlo. Ser conformistas y estancarnos no nos hace crecer como persona.

Puedo y siempre podré

No hay comentarios:

Publicar un comentario